11 octubre 2007

Que me esta pasando? Por que a mi?

Salí del aula casi corriendo. Estaba asustada, muy asustada y confundida. Y además, no tenía a quien recurrir. No podía contarle a nadie lo que me estaba pasando. Creerían que me estaba volviendo loca.

Presurosa, dejando a mis amigas atrás que me llamaban, me dirigí a la siguiente clase, no obstante, yo lo que verdaderamente deseaba era ir a la biblioteca. Algunos datos de el sueño rondaban por mi cabeza y tenia que buscarlos e intentar verificarlos. Aunque, tendría que esperar, para ello, hasta la hora de comer.

En las siguientes horas no me pude concentrar en nada. Tan solo deseaba que llegara la hora del almuerzo para poder investigar. Sin decirles que iba a hacer, deje a mis amigas en la cafetería y tire para la biblioteca. Afortunadamente, supongo que por la hora, esta se encontraba prácticamente vacía. Así que sin tiempo a arrepentirme me senté delante de un ordenador y abrí el buscador. Yo no era muy buena en esto de Internet, salvo con los Chats , pero aun así abrí San Google, que lo llamaba Carlota, y escribí el nombre de Luc intentando recordar su apellido. No hubo manera así que lo borre y probé con el de su prometida, ese si me lo sabia con apellido y todo. Teclee despacio Monique Vandamme y espere con el corazón encogido en el pecho. Para mi desilusión tampoco este nombre arrojo ninguna luz sobre mí búsqueda. Solo me aparecían paginas de Jean Claude Vandamme Debía ser cierto, me estaba volviendo loca. Cerré los ojos unos minutos e intente recordar mi conversación con Luc lo más detalladamente posible. Recordé que se iba con las tropas de Napoleón a Rusia, yo no lo sabia, el me lo había dicho, a si que, ya casi sin esperanzas, teclee en el buscador Napoleón en Rusia y espere.

Un sin fin de paginas resultaron de mi búsqueda y pique en la que mas me sonaba, la wikipedia, por haberla utilizado antes para hacer los trabajos en el instituto. Al parecer Napoleón si había ido a Rusia, así que armándome de paciencia y, lo más rápido que pude, me dispuse a leer las hazañas del emperador Napoleón hasta la hora de la siguiente clase.

No me podía creer que la historia de Napoleón fuese tan intensa… Joder, si que había hecho cosas el hombre. Media hora leyendo a piñón y no me había aclarado nada. Tampoco es que estuviese leyendo punto por punto, leía por encima buscando algún dato que me resultase familiar. Iba dándole a los diferentes enlaces sin saber muy bien donde indagar cuando, habiendo perdido casi las esperanzas apareció, ante mis ojos, el nombre del hermano de la prometida de Luc, el conde Dominique Vandamme, y yo, temblando de la impresión y aturdida ante la veracidad de mi sueño… releía una y otra vez estas líneas….

“Reintegrado en su mando del campo de Boulogne, ocupado en su ausencia por el general Sainte-Suzanne, se permitió instalarse a la fuerza en la casa del alcalde, haciendo tirar los muebles que no le parecieron convenientes.3 Napoleón envió a Vandamme a la 14ª División, tras nombrarle, el 1 de enero de 1811 presidente del Colegio Electoral de Hazebrouck. Poco antes le había otorgado el título de conde de Uneburgo.Aunque destinado al mando de las tropas westfalianas en la campaña de Rusia, no hizo la campaña, quedando en situación de disponible el 6 de agosto de 1812, a raíz de sus desavenencias con el rey Jerónimo Bonaparte"

No era posible, no podía ser posible. Es hombre había existido y yo sabia su nombre por que el profesor de patrullaje, disfrazado, me lo había dicho; ciertamente…. Me estaba volviendo loca.
Seguía con mis ojos pegados a la pantalla cuando de pronto el móvil empezó a sonar sacándome del trance en el que me encontraba. Era Carlota avisándome de la hora, en menos de dos minutos debía estar en el aula para la próxima clase y yo, mientras corría por los pasillo, deseaba no tener que verlo a el, otra vez.

Llegue con la cara desencajada a clase, y me senté entre Sophie y Carlota, sin poder creer aun lo que había leído. Había tenido un rato para procesar la información y seguía sin hacerlo. Cuando vi aparecer el nombre en la pantalla del ordenador, confirmándome que había sido un personaje real, me quede estupefacta y un escalofrió me recorrió la espina dorsal. Que era todo esto que me estaba pasando. Que yo tenia visiones del pasado? Pero, acaso eso era posible… y además…. Por que a mi?

Estaba en trance, sentía a mis amigas hablar entre ellas pero no podía entender lo que decían. Una y otra vez me veía en mi sueño. Y sentía los besos de Luc como la más dulce sensación que hubiese experimentado nunca. Las clases siguieron durante toda la tarde pero yo no les prestaba atención… era incapaz de pensar coherentemente, o de escuchar el barullo de mi alrededor así que me deje guiar por mis compañeras de un aula a otra como una autómata; las miraba, hacia que las escuchaba y me reía cuando ellas lo hacían, preguntándome si podría contarles lo que me estaba pasando sin que creyesen que había perdido la cordura y el tino.

No se por que lo hice pero opte por callarme. Al terminar las clases y después de darnos una ducha, nos fuimos a tomar algo a un pub que estaba cerca de la academia. Nos sentamos cerca de la barra y allí intercambiamos nuestras impresiones del primer día con varios compañeros. Unos chicos y chicas que debieron pensar que yo era bastante rara y retraída, y con los que yo hablaba solo con la esperanza de que me distrajesen lo suficiente como para no pensar mas en Luc, Napoleón, Dominic Vandamme, y la invasión de Rusia.

Volvimos a la academia antes del toque de queda. Entre la emoción del primer día y la clase de educación física, de por la tarde, estábamos cansadísimas y no dejábamos de bostezar. Había llegado la noche y debía dormir pero estaba aterrorizada. Y si volvía a soñar con el? Y si esos sueños me estaban revelando que me estaba volviendo loca? Y si….? Eran muchas preguntas sin repuestas. Muchos interrogantes para ser resueltos sin ayuda de nadie.

Mis compañeras se acostaron y yo sin ganas me puse el pijama y encendí la luz del flexo que había encima de la mesilla. Se me acaba de ocurrir una idea; Leería un libro y de seguro soñaría con la historia de sus protagonistas, al dormirme, como siempre me pasaba.

Una vez más, en menos de 24 horas, estaba equivocada.

“Estaba en casa desesperada, no podía parar quieta, su adorado Luc se casaba al día siguiente y a ella se le iba a partir el alma de dolor. No podía hablar con su padre. La afirmación de Luc el día anterior era cierta. Ya no era bienvenido en su casa. Sus ideales políticos chocaban frontalmente con los del hombre que lo había criado como a un hijo tras quedarse huérfano en España. Su padres habían sido amigos desde la infancia y juntos habían viajado a Francia en busca de un buen futuro.

Tampoco puede acudir a su madre. Ella es incapaz de contrariar a su marido y probablemente terminaría encerrada en su habitación por desobediente. Se pasea exasperada por su cuarto. Solo le queda una opción, no es buena idea, las consecuencias de su hazaña pueden ser devastadoras si algo no sale como ha previsto, pero tiene que arriesgarse, no le han dejado otra elección.

Sin hacer el menor ruido sale de su habitación. Mientras baja las escaleras despacio se coloca el sombrero y el chal sobre sus hombros. Puede ir andando hasta su destino. No queda lejos y además puede andar a paso ligero ya que no la acompaña nadie. Cierra la puerta con cuidado, si… puede hacerlo.

En menos de 20m toca a la puerta de la residencia de Luc y entra sin que el mayordomo que le abre la invite a pasar. Este se queda pasmado, esperando que la persona que debería acompañarla entre también y su cara es de autentica sorpresa cuando ve que no hay nadie ahí. Sarah lo mira desafiante y pide ver a Luc. Ya no hay marcha atrás, esta ahí y tiene que verlo para convérselo de que no se case. Lo ama como jamás podrá querer a nadie y el también la ama, ella lo sabe y el, aunque intente negarlo, también.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

que ganicas tenia de saber de este relato....a ver si lucas tambien sueña con ella y la reconoce en sueños, jejej

rayma....no se quien te invento, pero se equivoco, blogger.....

Anónimo dijo...

Cierto... ¿le pasará a Lucas lo mismo y por eso estuvo tan borde la primera vez? ¿por el susto del roce y de la visión?

Nemrac