04 octubre 2007

Resurreccion: Un sueño erotico?

Volví a la cama nerviosa. Mentalmente repase otra vez el sueño mientras inconscientemente me acariciaba los labios con un dedo; podía sentir todavía la huella de su beso en mi boca, de sus brazos rodeando mi cintura. Parecía tan real. Sabia por mis amigas que se podían tener sueños eróticos tan tangibles que parecían ciertos pero no era el caso; lo mas erótico de mi sueño había sido el beso. Además, había algo que me inquietaba más que todo eso; yo no creía saber tanto de napoleón y su esposa Josefina de Beauharnais. Es más podría haber jurado que jamás había escuchado su apellido antes de esta noche. Yo como todo el mundo sabia que el nombre de la esposa de Napoleón era Josefina pero hasta ahí. Todavía acostada intente repasar las clases de historia del instituto buscando el apellido de la emperatriz y el nombre de la prometida de Luc, Monique Vandamme, sin ningún resultado favorable. Probablemente me lo había inventado, con mi imaginación todo era posible. Si hasta había entendido el francés cuando yo siempre había dado ingles.

El sonido del despertador me hizo salir del letargo. Las chicas se despertaron sobresaltadas, según nuestro horario en 30m teníamos que estar en la cafetería para desayunar y en 45m teníamos nuestra primera clase.

Esta vez, al contrario que la noche anterior, fui la primera en ducharme. Yo ya llevaba rato despierta así que, incluso antes de que mis compañeras se hubiesen espabilado, ya yo estaba bajo el agua. Salí mucho más despejada, unos de los beneficios del agua fría, y decidida a olvidar el sueño y todo lo relativo a este… todo menos el beso. Finalmente era el primer beso que me daban así y con la ventaja añadida de que mi padre no podría matar al muchacho en cuestión; felizmente, o desgraciadamente para mi, este no existía. Por lo menos no existía según mi perspectiva de las cosas. Por que el existía, yo lo había visto el día anterior, pero solo compartía con Luc el físico, el envoltorio que diría mi amiga Rose Blue, sus padres grandes aficionados al blues la habían llamado así, Y pedazo de envoltorio… Pero por lo demás eran totalmente opuestos. Nada que ver.

- Que te pasa Sara, te encuentras mal -me dijo Carlota al sentarnos a desayunar mientras miraba fijamente las incipientes ojeras que tenia yo bajo los ojos.

- Si, por que tienes una mala cara! -corroboro Sophie mientras Susi asentía mostrándose de acuerdo.

- No me pasa nada, anoche tuve un sueño extraño…

- Extraño? -me preguntaron las tres al unísono- Que clase de sueño? Termino Susi.

- Pues extraño, raro… -como explicar algo que ni yo misma sabía que era.

- Erótico? -pregunto Sophie, lo suficiente alto como para que los chicos que estaban en las mesas contiguas dejasen de hablar e incluso de comer para prestar atención a la interesante conversación que estábamos teniendo nosotras.

- Schiiiiiiiiiiiitsssssss!!!! -Carlota, roja como un tomate, la reprendió- Estas loca?

- No!!!! Bueno no se… un beso se considera erótico? -desde luego yo lo había sentido así.

- Pues según que tipo de beso!!!! Como fue?

- Un beso… beso. -no hizo falta explicarles que clase de beso. Por mi sonrojo lo dedujeron

- Venga Sara cuéntanos… estaba bueno el… muchacho? -ya los chicos de las demás mesas ni se molestaban en disimular, algunos hasta nos miraban de soslayo. Dios por que les habría dicho nada, pensaba yo intentado buscar la manera de desviar la conversación. Las tres me miraban interesadas, me iba ser difícil escaquearme así que se los intente explicar, en susurros, y sin darles detalles de su físico.

-…Me dijo que me amaba y me beso. Me beso apasionadamente. Yo sentí como me temblaban las rodillas y como me aferraba a el desesperada y feliz. –termine de relatarles emocionada

- Y…? -me pregunto Susi expectante

- Y me desperté, cuando me susurro “Je t'aime” me desperté… -deje caer la cabeza sobre mis brazos apoyados en la mesa.

- Joder Sara… eso no se hace!!!!! Y ya esta? -Susi estaba indignada, por momentos estaba demostrandonos ser una gran romántica, pero el sueño se había acabado ahí…. que culpa tenia yo

- Si!!!! Ya esta.... que quieres… que me lo invente… me desperté y ya esta… se acabo el sueño!!!!

- A ver, entonces soñaste con un militar francés que estaba comprometido con una amiga de la emperatriz de Francia y que por consiguiente era amigo de Napoleón, no? y que además se iba a Rusia a luchar en nombre del ejercito del emperador…? Es eso? -asentí cohibida- Joder… pues podías haber sido mas leal y haber soñado con la guerra de Francia y España… vamos que podías haberlo puesto a luchar en la guerra en contra de Napoleón y no a favor… vamos digo yo!!!! -exclamo Carlota patriótica..

- Pero no lo controlaba yo!!!! Fue una sensación muy rara!!!!

- Rara? –murmuro Carlota

- Sentí como si no fuese un sueño… como si todo eso hubiese ocurrido de verdad…. Como si fuesen mis recuerdos….

-Venga Sara… hay sueños que parecen reales… como las pesadillas por ejemplo… pero al final… son solo sueños. -me dijo Sophie y sonriendo asentí, no me quedaba mas que confiar en que eso fuese así. Ilusa de mí.
En el aula nos sentamos en la fila de delante, según Carlota para ver y oír mejor. Como si a ella le hiciese falta. Me mordí la lengua para no recordarle que ella era la típica empollona. La que sacaba sobresalientes sin mucho esfuerzo, vamos todo lo contrario a mi.

La clase se fue llenando de gente. La primera hora nos tocaba patrullaje, que tal como su nombre indicaba era, suponía yo, el “arte” de patrullar. En el aula apenas se distinguían unas voces de otras. Todos estábamos vestidos de uniforme, el mismo pantalón azul y la misma camisa blanca; el mismo uniforme de la gente con la que yo me había criado y que a mi no me imponía ningún respeto… no, con un abuelo comisario.

A las ocho y media en punto el profesor entro por la puerta y se hizo el silencio. Todos lo miraban expectantes y yo quería que la tierra me tragase allí mismo. Yo lo había visto y mis compañeras también. El capullo del pasillo y el hombre de mi sueño estaba allí, de pie delante de nosotros, mirándonos como si fuésemos conejillos de indias, como carnaza, como… joder!!!!!

-Hola soy el subinspector Lucas Fernández y os voy a dar varias materias este cuatrimestre. Ahora mismo vamos a empezar con las clases de patrullaje, conducta y aptitud. Aquí vais a aprender a comportaros como auténticos policías; como miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad de estado. - a medida que el hablaba yo hacia lo posible para taparme la cara. Le había faltado el respeto a un superior y si el tío me enfilaba podía amargarme la vida; sin ninguna duda las siguientes clases me sentaría en el fondo mientras, rezaría para que no me reconociese aunque eso era esperar mucho por mi parte- empecemos por la actitud….

La charla duro algo más de media hora. Yo, aunque escuchaba distraída su explicación, seguía con los ojos pegados al cuadernillo. En el transcurso de ese tiempo varias veces levante la vista con disimulo y le encontré mirándome, idiota de mi no me di cuenta que con mi actitud estaba llamando su atención. Todos mis compañeros lo miraban impresionados menos yo que estaba totalmente intimidada y confundida. En mi mente intentaba buscar alguna conexión entre el y yo. Algo obviamente que no fuese cosa de mi imaginación o producto de un sueño. Sin querer su voz me hacia recordarlo. Podía jurar que la había escuchado antes susurrando mi nombre, y sus ojos me habían mirado con ternura, estaba segura pero… donde? Donde había sucedido todo eso? Y por que me resultaba tan familiar el nombre de Lucas Fernández?

Seguía sumida en mis pensamientos cuando un codazo de Carlota en mis costillas me saco de ellos de golpe. El subinspector se había acercado a nosotras mientras hablaba y yo no me había percatado de ello. Cuando levante la vista me lo encontré mirándome a mí y a mi cuaderno, donde inconcientemente había estado pintando corazoncitos con un boli rosa, de lo más infantil, regalo de mi padre que el cogio de mi mesa.

- Es por eso que la actitud de un policía es primordial, hay que tener mucha mano izquierda y saberse guardar el carácter y la mala leche para cuando nos quitemos el uniforme. Por ejemplo… si ustedes tropiezan con alguien, no pueden decirle cuatro sarcasmos a esa persona y luego salir corriendo. Se imaginan corriendo de alguien? -mis compañeros le rieron la gracia jocosos y el jugaba con mi boli- Eso no es lógico ni cívico, no señores… no es de buen ciudadano. Y antes de ser buenos policías tienen que ser ciudadanos ejemplares. Tienen que tener temple para lidiar cualquier capullo que se les ponga delante y no perder los nervios… si no… mal asunto!!!! -No me lo podía creer, estaba reprendiéndome delante de toda la clase. Se estaba riendo de mí. Claro que salvo mis compañeras nadie sabía que se refería al encontronazo que habíamos tenido el día anterior pero me daba igual. El idiota se había metido en mis sueños, no podía dejar de recordarlo y ahora se reía de mí en mi propia cara. Era el quien se había puesto como un energúmeno y se atrevía a decir solapadamente que yo tenia mala leche. Que coño se creía…- Hasta mañana!!!!! -nos dijo dándonos la espalda y volviendo a su mesa con la sensación de haberse metido a todos en el bolsillo.

Note que mis compañeros empezaban a abandonar el aula y como Carlota me daba unos codazos para que me levantase de una vez… Estaba avergonzada, una vez mas en apenas una hora desee que me tragase la tierra. Mire hacia mi izquierda y el resto de mi fila esperaba de pie a que yo les dejase paso. Así que no me quedo más remedio que hacerlo. Con la cabeza gacha pase a su lado sin mirarlo pero su voz, esa voz que tanto recordaba me llamo.

-Perdona… -hice como que no lo oía, si pretendía seguir riéndose de mi andaba listo-Espera un momento… -viendo mi poca disposición para hablar con el me cogio suave pero firmemente del brazo- siento lo de ayer…

Estaba intentando disculparse pero yo no podía contestarle por que ya no estaba allí…

“El escenario había cambiado, ahora se encontraban en una biblioteca, un despacho con un bello escritorio de nogal, un sofá rojo, libros por doquier en las librerías que cubrían las paredes y un globo terráqueo en una esquina. Tampoco su atuendo y el de Luc eran los mismos. El vestía un uniforme militar, una casaca roja sobre pantalones negros y ella un fino traje de muselina amarillo y un ridículo sombrero.

- Siento lo de ayer ma petit, Eso no debería haber sucedido!!!!
- No Luc, no lo dices en serio… me amas… me besaste por que me amas… no pudiste evitarlo!!!!
- Sarah…. No deberías haber venido… esto es una residencia de soltero… no has pensado en tu reputación? En la gente que te quiere, en tu madre, en tu padre?
- No Luc… yo solo he pensado en ti!!!!”

Retire mi brazo asustada, solo pude balbucear un “de acuerdo no pasa nada” antes de salir precipitadamente del aula. Había vuelto a pasar, al tocarme había vuelto a tener otra desagradable vision… que me estaba pasando.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

no sabeis las ganas que tengo de que continueis este relato....es genial....besotes, rayma.

pd: en lucha constante con el blogger.....

Anónimo dijo...

Uno de los pocos relatos capaz de dejarme sin palabras... y deseando ver cómo sigue.

Nemrac